• 5-2-2018 | Wolters Kluwer
  • Ante la imposibilidad de contactar con el demandado por otros medios, el Tribunal Supremo de la provincia de Ontario, en Canadá, ha autorizado la notificación de una denuncia civil a través de Instagram.

Carlos B Fernández. Todavía con timidez, pero sin duda de forma cada vez más decidida, la tecnología y sus aplicaciones comienzan a transformar algunas de las tradicionales instituciones del Derecho, incluidas alguna tran arraigadas como el procedimiento civil.

Un nuevo ejemplo de esto llega de Canadá, donde el Tribunal Supremo de la provincia de Ontario, ha autorizado la notificación de una demanda civil contra una persona a través de la red social Instagram.

Según informa el diario digital Canadian Lawyer, una abogada, Tara Vasdani, obtuvo esa autorización tras no poder localizar al demandado por otros medios.

Téngase en cuenta que en el derecho procesal civil canadiense, la notificación de la demanda debe realizarse personalmente al demandado por el actor o su abogado (§ 16.02 de las Rules of Civil Procedure: “by leaving a copy of the document with the individual”), si bien el tribunal puede disponer medios alternativos, en caso de que el demandado no pueda ser localizado (“§ 16.03: “Where these rules or an order of the court permit service by an alternative to personal service, service shall be made in accordance with this rule.”)

En el caso, la abogada representa a una compañía de seguros que, tras presentar la demanda ante el tribunal de instancia a finales de agosto pasado, intentó hacer llegar la demanda a la contraparte por diferentes medios.

En primer lugar intentó usar una dirección física, pero resultó que el demandado se había mudado. Luego intentó usar el correo electrónico con certificado de lectura, pero sus mensajes fueron ignorados o nunca se leyeron.

Seguidamente Vasdani buscó al demandado en LinkedIn y contactó con quien aparecía como su último empleador, quien le dijo que tal persona nunca había trabajado en esa empresa.

Tras intentar localizar al demandado en otras redes sociales, también sin éxito, la abogada se planteó recurrir a Instagram, pues comprobó que el demandado lo usaba con mucha mayor frecuencia que Facebook u otras aplicaciones. Por tanto, después de localizarle en Instagram, Vasdani presentó una solicitud ante el tribunal planteando la posibilidad de realizar la notificación a través de Instagram y LinkedIn.

Una vez que el tribunal autorizó esta posibilidad, la abogada envió al demandado un mensaje privado en Instagram, con la documentación del caso.

Esta autorización sigue la línea de una reciente modificación introducida por el Ministerio de Justicia canadiense, que ha hecho posible la notificación de demandas civiles por correo electrónico, un cambio que según Vasdani habría sido inconcebible para muchos abogados hace un año.

Según esta letrada «los profesionales debemos ser capaces de cambiar la forma en que usamos y aplicamos la ley y las herramientas legales para que sean más consistentes con los intereses de las ciudadanos, porque ello nos permitirá ser más eficaces, mejorar la satisfacción de los clientes y aumentar el prestigio de la profesiónas personas que estamos tratando de hacer legalmente responsables, nos encontraremos con la eficacia, la satisfacción del cliente y el prestigio que la profesión merece seguir teniendo.»

Fuente: laley.es

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