Estudiantes de ESO conocen de primera mano el trabajo de los notarios

A1-52601302.jpg«Echar un firma, eso lo hace cualquiera. Hasta yo podría ser notario». Esta es la manida cantinela contra la que durante años han tenido que luchar los notarios. «Al final se trata de una caricatura, pero detrás hay mucho trabajo», reconoce Rafael Lacort, que ejerce en su despacho de Hondarribia. Con ese punto de vista se acercaron hasta su despacho una mañana Maddi Agirregomezkorta y Claudia Pop, estudiantes de Segundo de Bachillerato del Instituto Talaia y que por una rato comprobaron de primera mano que el trabajo de fedatario va más a allá de ‘echar’ una simple rúbrica.

Estas dos estudiantes hondarribiarras participaron en la iniciativa ‘Notario por un Día’ que ha puesto en marcha el Consejo General de Notariado y que persigue que al menos un joven de cada Comunidad Autónoma viva la experiencia de acompañar a un fedatario en su notaría durante una jornada completa. «El objetivo es contar a los estudiantes de Bachillerato el papel de los notarios en la sociedad, y el valor de la seguridad jurídica preventiva, tanto para los que se planteen su futuro universitario en la rama de Derecho o Notariado, como para aquellos que se decanten por otro escenario profesional», recalcan los organizadores de la iniciativa.

Tanto Maddi como Claudia se mostraron encantadas de vivir esta experiencia de la mano de un notario. «Estamos contentas porque al final el oficio de notario no es que sea muy habitual, no solemos conocer a gente que trabaje en ello y contar con esta oportunidad es muy importante. Si quieres dedicarte a esto, creo que es fundamental conocer de qué manera funciona este mundillo», recalca Maddi, que aún no tiene claro por dónde encaminar sus pasos de futuro. Muy al contrario que su compañera Claudia quien subrayó que «yo al menos quiero estudiar Derecho, que al final es lo que te lleva a hacer Notariado. Le damos mucho valor a esta experiencia».

 
 

Conocimiento

Pero sin duda quien se mostraba encantado con la iniciativa era Rafael Lacort, ya que le ha dado la oportunidad de ofrecer su conocimiento a dos jóvenes que se encuentran en un momento crucial de su carrera vital: «Están en un momento difícil y delicado, pero estoy muy contento de enseñarles cómo trabaja un notario en su día a día». Lacort ha dado el paso adelante porque quiere devolver parte de lo que otros notarios le ofrecieron en su momento. «Me acuerdo de que cuando estaba en la misma situación en la que se encuentran ellas ahora, decidí estudiar Notariado porque hubo gente que confió en mí y quiero hacer lo mismo con estas estudiantes. Lo mejor de todo es que las he visto inquietas, con mucha curiosidad y con bastantes preguntas».

Esas cuestiones que le fueron presentando las dos estudiante de Talaia poco a poco fueron respondidas por el propio Lacort. Aunque la mejor manera de entender el día a día de un trabajo es conocerlo de primera mano. Y también tuvieron oportunidad para ello. No en vano, pudieron acceder a varias firmas, incluso fueron testigos del documento de la primera boda que se ha oficiado ante notario en Hondarribia. «También han conocido el paso siguiente de lo que hay a la firma. Por ejemplo, hemos cumplimentado el trámite yendo al Registro Civil». «Al final te puedes hacer una idea de lo que supone un trabajo como este, pero conocerlo y entrar en el despacho y ver el proceso ha sido muy bonito. No me imaginaba que fuera para tanto», reconoce Maddi.

Lo cierto es que la iniciativa ha valido para algo más que conocer la labor de un fedatario. Lacort también les tendió la mano para ser su instructor en caso de que decidan seguir sus mismos pasos. «Si alguna de las dos se decanta por la carrera de Derecho y luego continúa con la de Notariado, he tomado el compromiso con ellas de ser su preparador. Cuando yo comencé mis estudios, tuve la suerte de que di mis primeros pasos con el que se consideraba que era el mejor en aquella época, por lo que tomé el compromiso de formar a nuevos notarios. Ya he formado a dos notarios más jóvenes que yo y ahora les he tendido la mano a ellas».

Importancia de los idiomas

Probablemente Claudia opte por responder a la propuesta de Lacort, ya que «tengo claro que quiero estudiar Derecho», explica. Quien aún no se ha decidido por un camino concreto es Maddi que subraya que «quiero hacer Traducción e Interpretación pero después del día que hemos pasado junto a él, también me ha gustado la idea de ser notario». El fedatario hondarribiarra quitaba importancia a los estudios que fueran a realizar y más en el caso de Maddi, ya que «en este oficio los idiomas también son importantes. Por ejemplo, por el entorno en que vivimos y el auge del turismo que estamos notando, cada vez son más los extranjeros que te puedes encontrar en una notaría para la compra o venta de una vivienda. Es un mercado que cada vez está más en auge», reconoce Lacort.

Lo que más sorprendió a ambas estudiantes hondarribiarras es el amplio abanico de actividades que abarca el trabajo de un notario. Echar una firma parece sencillo, pero va mucho más allá: «Me ha impactado todo lo que hacen. Tenía la impresión de que hacían cosas monótonas como la compraventa de una casa. Pero, por ejemplo, nos ha contado que la gente tiene la oportunidad de entrar de manera libre a una notaría y hacer consultas sin que te cobren por solucionártela». Es por eso que Lacort tiene claro que un fedatario debe ser una persona que esté arraigada en la sociedad en la que vive. «Nuestro trabajo es estar con la gente. De hecho, tenemos que ser personas que estén implicadas en la sociedad y a pie de calle, no deber ser alguien que cierra a las tres el despacho y hasta el día siguiente no te habla».

El trabajo del notario también requiere ir renovándose de vez cuando. Con la recién aprobada ley de Derecho Civil Vasco -que deja más libertad ahora de realizar los testamentos- los fedatarios han tenido que estudiárselo al dedillo para aplicarlo de la manera más adecuada posible: «Aquí hay que ir estudiando y no vale quedarse quieto. Siempre hay novedades como la nueva ley que ha entrado en vigor, pero lo cierto es que a medida que nos vayan presentando casos tendremos la oportunidad de aprenderlo mejor».

Fuente: diariovasco.com

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