Los notarios y registradores de la propiedad niegan que hayan cobrado de más a la hora de cancelar hipotecas, tal y como ha denunciado la Organización de Consumidores y Usuarios de España.

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha considerado positivo pero «insuficiente» el nuevo Real Decreto aprobado que clarifica los aranceles a cobrar por los notarios y registradores en las cancelaciones hipotecarias, según informa la asociación en un comunicado.

La OCU denunció el pasado mes de septiembre que un gran número de notarios y registradores habían cobrado más de 90 millones de euros de más en 2010 por las cancelaciones hipotecarias, incumpliendo las rebajas del arancel que incorporaba la Ley 41/2007. El pasado viernes, el Consejo de Ministros aprobó la modificación legal a raíz de la denuncia de la OCU.

En declaraciones a TPA Noticias, los decanos de ambos colegios en Asturias culpan a la legislación existente hasta ahora de la confusión creada en torno a las tarifas. Un nuevo real decreto acaba de clarificar cuánto hay que desembolsar para decir adiós a la hipoteca.

Después de pagar el préstamo toca cancelarlo y eso también tiene un coste. Un nuevo real decreto viene a aclarar la normativa. El notario, en el caso de que el cliente haga personalmente la gestión, no deberá cobrarle más de 55 euros y el registrador de la propiedad un tope de 24 euros a los que habría que añadir 9 euros más por otros dos conceptos obligatorios. En total, 88 euros por deshacernos de la hipoteca.

Los registradores de la propiedad niegan que se hayan pasado con los honorarios en los últimos años, tal y como ha denunciado la OCU.

«No hemos cobrado de más en ningún momento. Hemos aplicado la Ley estrictamente». La prueba de que no lo estábamos haciendo mal es que el Real Decreto viene a establecer ahora esa regulación especial para que todas las cancelaciones puedan ser minutadas de la misma forma», señala Margarita de Carlos Muñoz, decana del Colegio de Registradores de la Propiedad en Asturias

Pero antes no era así y no en todos los casos se facturaba lo mismo. Para los notarios el real decreto es positivo aunque critican que desde 1989 han sufrido 63 rebajas arancelarias, esta la última.

Los fedatarios animan a los ciudadanos a recurrir al servicio de atención al público del Colegio de Notarios ante cualquier duda ya que,  aunque ahora cancelar la hipoteca ya tenga una tarifa fija en función de quién nos haga los trámites los precios pueden superar con creces el mínimo. Si es el banco el que hace la gestión, la factura llega a elevarse a los 300 o 400 euros.

Fuente: rtpa.es

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